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Hay bodas que se sienten. Que se viven en el alma. Que se tejen cuidadosamente con historias, símbolos y emociones. Así fue la boda de Julia & Woo: un manifiesto visual donde cada flor, cada tela y cada detalle reflejaron lo más sagrado de su unión: su esencia.
Porque crear una boda verdaderamente significativa no consiste solo en elegir una paleta de colores, sino en comprender profundamente quiénes son los novios, de dónde vienen y hacia dónde van. Y lograr traducirlo en un espacio tangible.
Una pareja entre mundos
Julia y Woo viven en Nueva York, pero sus raíces están profundamente entrelazadas con México y Corea. Este cruce de culturas fue el hilo conductor de todo el diseño. La ceremonia, íntima y profundamente emotiva, se celebró frente a un altar enmarcado con textiles blancos y una composición floral de ensueño. Las texturas, las formas, los aromas: todo hablaba de armonía y sofisticación.
Julia llevó un vestido de novia minimalista, estructurado, de líneas puras y escote romántico. Woo lució un traje negro perfectamente entallado. Juntos, irradiaban una elegancia atemporal.
Grullas al viento, raíces al alma
La gran protagonista del diseño fue la grulla, símbolo de longevidad y fortuna en la cultura coreana. Desde el techo, cientos de grullas blancas volaban entre telas vaporosas que descendían suavemente desde las alturas. El efecto era cinematográfico: un cielo de papel suspendido sobre un amor que se sentía eterno.
La intervención ambiental fue un logro de alto impacto y belleza orgánica. Cada detalle fue cuidadosamente pensado: la iluminación, los tonos neutros, las mesas largas con arreglos florales flotantes, la mezcla perfecta entre lo natural y lo etéreo.
Montserrat Pérez: la mente detrás del gran evento
Desde el primer momento, el concepto fue claro: crear una celebración que fusionara lo mexicano, lo coreano y lo neoyorquino en un solo lenguaje, elegante, etéreo y contemporáneo. Y así fue.
Toda la boda fue conceptualizada, diseñada, planeada, decorada y ejecutada por la wedding planner Montserrat Pérez, quien supo capturar la esencia de la pareja con un nivel de detalle, estética y emoción que raya en lo sublime.
Un banquete para los sentidos
El montaje fue impecable: sillas de diseño contemporáneo, manteles blancos que servían de lienzo al color de las flores, y velas que extendían la magia hasta entrada la noche. Cada rincón respiraba estilo editorial, lujo relajado y elegancia fluida.
La boda de Julia y Woo además de ser una celebración; fue una experiencia sensorial y emocional que nos recordó lo que significa diseñar con intención. También fue una carta de amor a la multiculturalidad, a las raíces y al presente que se construye entre dos almas que deciden unirse, para siempre.
Montserrat Pérez Wedding Planner
Proveedores:
Wedding planner: @montserratperezwp | Flores @polenfloresdf | Venue @piedraviva.tepoztlan | Foto @artevisualmf | Banquete @cuevaseventosmx
