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La fecha de tu boda no solo es una casilla más que marcar en la planeación. Es el punto de partida para casi todo: clima, presupuesto, disponibilidad de proveedores y hasta el tipo de vestido o decoración que vas a elegir.
Una de las dudas más comunes entre novias y novios es:
¿Conviene más casarse antes o después de julio?
Y la respuesta no es tan simple como parece. Aquí te ayudamos a analizar los pros y contras para que tomes la mejor decisión para ustedes como pareja.
¿Por qué julio es un parteaguas en las bodas?
En México (y en muchos países de Latinoamérica), julio marca la mitad del año y el inicio de la temporada de lluvias, vacaciones escolares y eventos familiares. También divide el calendario en lo que muchos proveedores consideran “temporada alta” vs “media/baja”.
Eso impacta los precios, la disponibilidad y hasta el mood general de los invitados.
Casarse antes de julio: ventajas y desventajas
Ventajas
- Clima más estable: De febrero a junio es más probable tener días soleados, sobre todo si quieres una boda al aire libre.
- Más disponibilidad de proveedores: Muchos aún no tienen fechas saturadas como en octubre-diciembre.
- Precios más accesibles (a veces): Algunos lugares aún manejan tarifas de “temporada baja” si reservas con anticipación.
- Menos competencia: Habrá menos bodas en tu misma fecha, lo cual es útil si tus invitados tienen varios compromisos.
Desventajas
- Menos tiempo para planear si ya estás en el año en curso.
- Fechas cercanas a Semana Santa o Día de las Madres pueden complicar agendas y presupuestos.
- Calor en algunos estados (como Morelos, Jalisco o Yucatán) puede ser intenso entre mayo y junio.
Casarse después de julio: ventajas y desventajas
Ventajas
- Paisajes más verdes y frescos: Si te encantan los jardines con vegetación viva y cielos nublados, esta es tu temporada.
- Ambiente festivo: Muchos invitados están en modo “fin de año” y más abiertos a viajes o celebraciones largas.
- Decoraciones más cálidas: Octubre a diciembre permite jugar con velas, luces tenues, tonos tierra y cenas más acogedoras.
Desventajas
- Lluvias más impredecibles: Agosto y septiembre son los meses más lluviosos en la mayor parte de México.
- Proveedores más saturados: Octubre y noviembre son los favoritos para bodas, y eso eleva costos y reduce opciones.
- Más tráfico y menos disponibilidad en hoteles, sobre todo si tu boda es destino o coincide con puentes/vacaciones.
Factores clave para elegir tu fecha (más allá del mes)
1. El estilo de boda que sueñas
¿Imaginas una comida al aire libre con sol suave o una cena íntima con lluvia de fondo? Elige la temporada que mejor lo haga posible.
2. Tu presupuesto
Algunos venues tienen precios más accesibles entre febrero y junio, mientras que otros ofrecen descuentos especiales en agosto o septiembre por ser temporada media.
3. Tus invitados clave
Si tus personas más importantes tienen hijos en edad escolar, considera que julio-agosto puede ser más fácil para viajar. Pero si hay adultos mayores, evita los extremos de calor o lluvias fuertes.
4. Disponibilidad de proveedores soñados
Si ya sabes quién quieres que te maquille, oficie, cante o cocine… ¡Pregunta sus fechas libres! A veces tu fecha se elige sola.
No hay una “mejor fecha” universal para casarse, pero sí hay una fecha perfecta para ti. Antes de julio tendrás sol, menos prisas y más calma. Después de julio hay color, romance y ese aire de cierre de ciclo que a muchas parejas les encanta.
Lo más importante es que elijas una fecha que los haga sentir emocionados, en paz y listos para celebrar a su manera.