Podríamos pasar horas y horas viendo el trabajo de nuestros fotógrafos, es impresionante la capacidad que tienen de transmitir tantas emociones a través de sus fotos y cómo logran contar una historia, sin necesidad de usar las palabras. Parece imposible escoger, cuál de todas las sesiones es nuestra favorita, pero sin duda la post-boda tiene un encanto y una magia difícil de describir, puede ser porque ya están más relajados, porque ya no hay nervios, porque no hay prisas.. no estamos muy seguras del por qué, pero sí, de que no puedes dejar de hacerla.
¿Aún no estás segura? Te compartimos 5 razones que terminarán de convencerte; y además la sesión de Rachel y Carlos por Carito Photography para inspirarte ¡Te encantará!
- Tiempo: No hay nada que hacer antes ni después
El día de la boda está perfectamente planeado y aunque casi siempre, se tiene destinado un espacio para la sesión en pareja, el factor tiempo no deja de estar presente; hay algo que los novios tienen que hacer antes y a donde tienen que llegar después. En la sesión post-boda, todo el tiempo es suyo, no hay prisas, nervios, ni nadie presionandolos para que se apuren ¡Sin duda eso se refleja en las fotos!
Un tiempo para ustedes y nada más.
Rachel, Carlos y Carito, al terminar la sesión, fueron por una pizza, no tenían nada de qué preocuparse, ni presiones con el tiempo.
- Locación ¡Donde quieran!
La sesión postboda les da la oportunidad de escoger un escenario único para sus fotos; pueden experimentar espacios nuevos o escoger un lugar que sea representativo para ustedes; son fotos igual de bonitas pero totalmente diferentes a las que van a tener con todos los demás el día de su boda.
Rachel y Carlos son el ejemplo perfecto de esto, ellos eligieron su playa favorita, a donde van casi todos los días después del trabajo a sentarse, tomar algo, ver el atardecer. El día de su boda, estaban lejos durante el atardecer para poder ir allá para tomar fotos, así que decidieron aprovechar el lugar para su sesión post-boda.
- Confianza total con su fotógrafo
Lo más común es que el mismo fotógrafo de la boda, sea el responsable de la sesión post-boda y esto es una súper ventaja; ya se conocen, ya nada les da pena y todo fluye mucho mejor. Esa confianza y libertad hará que tengan unas fotos únicas.
- Se vale ensuciarse
Si deciden volver a usar su vestido y traje, se darán cuenta que perderle el miedo a ensuciarse hace toda la diferencia; en la sesión post-boda se pueden atrever a tener mucho más movimiento correr, brincar y ya no va a estar presente ese nervio y ganas de verse perfectos para el gran día. Van a ser fotos mucho más relajadas y sin poses.
Ellos encontraron la casa abandonada y como tenían tiempo y ganas de aventura, se atrevieron a meterse y tomar unas fotos ahí también.
- Una experiencia más… juntos
Es un super plan para cerrar esta etapa, una oportunidad más de vivir y experimentar algo nuevo juntos; de divertirse, reírse y tener esas fotos que congelen el momento y les permitan revivirlo mil veces.
Fotos: Carito Photography – Sesión post-boda Rachel & Carlos en Porto, Portugal.
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